Siempre me ha sorprendido la gente que asegura que México no da buenos músicos o compositores. Perate carnal, cómo de que no, nuestro flaco de oro, Consuelito de mis amores, el orgullo de mi querido León; José Alfredo, Armandito tan talentoso, y mira que en poquitas líneas ya te tengo pura joya. Lo más curioso es que con ellos brillan sus letras, pero no a todos les relucen las canciones, pa´que es más que la verdad, algunos se rifan en lo lírico, pero la voz no es su fuerte, raro es escuchar a un brutal compositor con su voz de encanto. De que los hay pues si existen, y pa’ pronto; Juan Gabriel es uno de ellos, un michoacano que creció en Chihuahua y vino a triunfar a la gran ciudad.
Yo mucho tiempo no le había prestado oído a su música, pues porque uno es roquero, que tal si lo escuchaba y ya no me latía Nirvana o Judas Priest; Unknown Mortal Orchestra ya no sonaría igual, pero era chavo, y se va aprendiendo. También influye que cuando desperté, las canciones de Juan Gabriel siempre habían estado ahí. Que Tito Monterroso me perdone, pero es verdad, una larga carrera con muchísimas composiciones, ser el mexicano con más ventas a nivel mundial, coronarse como artífice de hits con éxito inmediato, es como la publicidad, te bombardean tanto que realmente no te das tinta de lo que tienes enfrente. Como buen redentor, hice lo que muchos deberíamos hacer en nuestra vida cotidiana y me detuve a escuchar.
En esos momentos, me anduve topando con muy buenos tracks, ya es cuando entiendes el pedo, como aquella de aires westerns y temáticas Verdaguescas, titulada “Yo No Nací Para Amar”, canción nostálgica, que cuenta una historia muy triste, del calibre, si no se me hace con está pues, yo creo que ya valió. Las secciones musicales son estupendas y esconden un coro de tímido piano, que persigue la melodía, sublime.
No me atreveré a decir que soy un amplio conocedor, porque quién neta se ha rifado toda su discografía, ni el más fan, aunque no dudo que exista. Pero lo que puedo asegurar es que me ha tocado escuchar más de un género de la mano de “El Divo de Juárez”, lo suyo es como el rostro ovalado, le queda de todo, un botón para esto ‘Vienes o Voy’, una que tal vez no a todos les encante, pero hay que reconocer que es un gran track, de cuando el eurodance y el beat se apoderaban de la radio, de producción muy noventera, pero que hablan del ser polifacético que es este cantante, y si me preguntan, es lo más Madonna que le he escuchado, así que, Strike a pose.
Una clásica que goza de una letra dolorosa, lleva por título ‘La Diferencia’, al estilo José Alfredo, que como bien dice Bibi Aguilar, es de esas para una desgraciada que te mandó a la goma: “Va legal, fuiste una culera, y a pesar de eso yo siempre te quise”, esto a ritmo de mariachi, y con un timing en su interpretación que hace aullar por un Tequila, es de la mejor forma para saborear la melancolía.
Allá por el 81 Juanga, nos regaló una producción de mariachi, jocosa, de melodías rápidas, como bien dirían; con todo su estilacho, fraseos muy largos y esa sensación de que lo que se ve no se juzga. En éste nos topamos con ‘Todo’, de secciones brillantes, y se nota un gran despliegue de recursos musicales, además de una letra que profesa, “a ti lo que quieras, cuando quieras, porque como tú, nadie”.
https://www.youtube.com/watch?v=i3DCSRNeDn0
Yo creo, que de las canciones de Juan Gabriel que más me ha tocado escuchar son sus dúos, últimamente más que antes, por su último disco; que como los meros chingones, relanzan sus canciones, solo que más para la chaviza o con artistas invitados. Sin ofender a músicos invitados en esta etapa, no hay como las rolas que se aventaba con Rocio Durcal, ese ambiente era muy singular, y ‘Perdóname, Olvídalo’ es la prueba de ello, un dúo muy a lo Pimpinela, y una letra de ya no vuelvas a mi, simplemente exquisito.
Aunque no he hecho mucho hincapié en su trayectoria, creo que sería redundante decir que ha sido muy amplia, porque además Juanga la ha rifado de todo, le hace al canto, a la actuada también, en este rubro, bastante flojito. Verlo como galán que enamora a todas, pues no convence en cámara, pero qué tal con sus canciones, ahí sí; deme 10, una de estas rolas es ‘De La Cabeza a Los Pies’, con un estilo vocal de mucho feeling, y una letra que te dice ‘Como te quiero desgraciada’, está ideal para dar serenata con una copas de más, ¿tienes que estar, necesariamente, con copas de más?, sí.
“Aunque me cueste la vida, y aunque me cueste llanto, te aseguro que te voy a olvidar”, si este arroz ya no se te coció chiquita, yo sé que nomás vienes a ver que sacas. Si te llegan a dedicar el medley ‘Te Voy a Olvidar/Ya para qué/La Farsante’, es porque de verdad si te pasaste de lanza, una interpretación brutal, a la cual se le adicionó la música de La Banda El Recodo y nos da un “chinga tu madre, yo te quería” con frases tan brutales como “Ya verás que hasta vas a aprender como debes amar a Dios en tierra ajena” y la más chida “Y voy a hacer que tu, incadita, me pidas perdón y me implores amor, delante de tu mugroso y mantenido amante”, como para agarrar la borrachera, peligrosamente como rola anterior del conteo.
¿Alguien sabe cómo componer hits?, hay quienes con el tiempo encuentran una formula, o van experimentando hasta lograr una respuesta favorable del público, Juan Gabriel desde el inicio empezó con hits, no pegó luego de una exposición larga a los medios, empezó inmediatamente, por su carisma y capacidad letrística, pero su voz también fue un factor importante, donde más reluce es en ‘Ya Lo Sé que Tú Te Vas’, un track de dolor intenso, pero que derrocha capacidades técnicas notorias, con una estructura de balada desgarradora al estilo Daniela Romo o Lupita D´Alessio, no es muy difícil saber que fue uno de los hits más grandes de su carrera.
https://www.youtube.com/watch?v=f3gEGAX43fs
Hablar de ‘El Noa Noa’ es encerrar en una canción a Juan Gabriel, por completo, sus orígenes, su estilo musical, su estética, temáticas líricas, y su capacidad de componer, por esas cosas es un corte invaluable, de conocimiento popular, en donde puedes preguntarle a alguien en México que sigue después de “Vamos al…” e inmediatamente lo sabrán, lo que se ve no se juzga, arriba Juárez y vamos al Noa Noa, son las tres frases que irremediablemente te recuerdan al Divo de Juárez.
La última de esta lista de canciones de Juan Gabriel, es la interpretó en su primera aparición en Bellas Artes, ya eso es indicio de lo muy ídolo que era en ese momento, ‘Inocente Pobre Amigo’ es toda una historia, es el recordatorio de lo mal pedo que es bajarle la pareja a un amigo, “Y ese tonto que te quiere, y que se enamoró de ti, no sabe lo que le espera, y piensa que va a ser feliz”. Dicha presentación es como una película de acción, tiene drama, peligro y humor, prueba de que no sólo escribe y compone, también es dinamita sobre el escenario, para muestra un botón.