@perskita
6:00 pm, 17 de septiembre 2013.
Solo minutos antes de que Ghost saliera al escenario, la lluvia perturbó a los miles de asistentes doom metaleros que apenas llenaban la mitad del Foro Sol. Caras pintadas de blanco y negro, padres de familia corriendo de un lado a otro para encontrar al “vende hules de a $25” para cubrir a sus pequeños de entre 3 y 8 quizá 9 años.
De repente la magestuosa voz de líder metalero Papa Emeritus II nos invitó a disfrutar de un banquete diabólico con temas de su reciente disco “Infestissuman”, tema del mismo nombre con el que abrió el telón.
´Per Aspera Ad Inferni´ convocó a varios de los dobles del Papa Emeritus a levantar las manos y orar por las almas que vagaban en busca de un techo donde cubrirse de la madre naturaleza.
En tanto que ´Con Clavi Con Dio´ fue la muestra clara de recordarnos quien es verdaderamente Ghost, al perdonar los pecados de quienes se decidieron a sufrir como muchos de los que estábamos parados con los brazos abiertos recibiendo la lluvia.
´Stay By Him´ y ´Year Zero´ nos hicieron sacar a los demonios internos y reunirlos en cada grito mencionando ¡Ghost Ghost Ghost!
Todos fuimos convocados con un solo fin… celebrar el ´Ritual´ que la banda sueca nos tenía preparado, fue como practicar por momentos el ocultismo y recibir las letras demoniacas y surrealistas para divagar en viajes como ´Monstrance Clock´.
Con una presentación delicada y en las tinieblas, nos dejaron ir en paz.
Pasaron aproximadamente 45 minutos y la lluvia no cesaba, no había modo de esconderse de la humedad, no quedaba más que esperar el momento de extasiarnos con Slayer y olvidarnos de mal clima. Por unos instantes solo se sentían gotas ligeras, aún existía la esperanza de que aquellas nubes grises se dispersaran. Pero oh sorpresa, una segunda tormenta comenzó a caer de nuevo sobre nuestras cabezas, incomodando a los que usamos lentes y a los retoños de baja estatura que seguían abrazados en las piernas de sus progenitores.
Muchas dudas de boca en boca escuché, que si Dave Lombardo es el mejor, que si Jeff estuviera vivo, a ver a que suena Paul Bostaph después de un rato de no tocar con la banda, ojalá se rife Gary Holt…
Las guitarras furiosas de ´World Painted Blood´, ´ Disciple´ y ´War Ensemble´ no tardaron es escucharse, en tanto que cada golpeteo rudo de la batería liderada por Gary en ´Mandatory Suicide´, ´Dead Skin Mask´ y ´South Of Heaven´ alcanzaban cada rincón del Foro.
Tom Araya terminó por apuñalarnos con su “mucho mojados” segundos antes de que sonara ´Raining Blood´, que apaleo a cada cuerpo atrapado entre el slam, y playeras húmedas, y por si fuera poco la historia nazi del ´Angel of Death´ terminó por devastarnos.
Al final y por más de 40 minutos nuestros oídos explotaron con Slayer, y aunque se veía un poco más lleno, el Foro Sol seguía teniendo huecos donde el frío se colaba.
Los fanáticos de corazón se pusieron sentimentales y exigentes, tras escuchar esto: “Pues si rifa el guitarro, pero nadie como Jeff y la neta Lombardo, es Lombardo”, sabias palabras de un experto metalero de la old school.
A pesar de dos importantes pérdidas: Dave Lombardo y el fallecido guitarrista Jeff Hanneman, Slayer nos dejó exhaustos, con ganas de más ruido y sin duda cumplieron su palabra:
“No queremos decepcionar a nuestros fans…”
Las luces del Foro Sol se prendieron e increíble pero cierto ya estaba lleno. Barbas largas, melenas canosas, chamarras de piel mojadas y Delicados en mano sin filtro aparecieron del inframundo. Ejecutivos con saco y corbata presumían de esa playera oficial de Iron Maiden: Made In England, explicando por teléfono que había calles inundadas pero que todavía podían llegar.
La lluvia por fin había parado, nuestros cuerpos pesados e inmóviles titiriteaban de frío, pues la noche comenzaba y el aire no parecía estar a nuestro favor.
Solo nos quedaba como opción prender un tabaco y tratar de estar juntos conocidos con desconocidos para tratar de hacer calor, platicando amenamente sobre lo mal que nos han tratado los huracanes y con el anhelo de que ya no lloviera.
Un “otra vez no” fue la expresión que muchos dijeron cuando de nuevo el clima hizo de las suyas, no quedaba más que resignarnos ante ello, aunque solo fue una llovizna que terminamos ignorando cuando “Doctor Doctor” de UFO dio inicio al Made In England que estábamos por vivir.
´Moonchild´ abrió el show e inmediatamente vimos a un Bruce Dickinson diciendo “Welcome To The Iron Maiden Show” con un sobrero de charro.
Los aplausos y los gritos de guerra de la vieja escuela no tardaron en escucharse con ´Can I Play With Madness´ y ´The Prisioner´.
Iron Maiden bombardeó el Foro Sol con ´2 Minutes To Midnight´, ´Afraid To Shoot Strangers´, ´The Trooper´, ´The Number Of The Beast´ y la esperada presencia de Eddie vestido de pirata.
Otra sorpresa más con ´Phantom Of The Opera´, que muy pocas veces suena en tanto que ´Run To The Hills´ desgarró nuestras gargantas.
Aquel recuerdo del avión blanco con el logo de Maiden, llegó al escenario húmedo con ´Wasted Years´.
Una especie de nacimiento de hielo surgió desde las entrañas del escenario, donde deleitamos la canción ´Seventh Son Of A Seven Son´, de donde al final nació un nuevo integrante sostenido en las manos de Eddie, dándole paso a ´The Clairvoyant´ y recordándonos que nuestras fobias pueden desaparecer escuchando ´Fear Of The Dark´.
´Iron Maiden´, ´Churchill´s Speech´, ´Aces High´ y ´The Evil That Me Do´ fue uno de esos repertorios que te hacen olvidar todo, y claro ya no podíamos luchar más contra esa emoción por los cohetes y luces pirotécnicas.
La alegría nos invadió aún más al escuchar que Bruce recordó que el 16 de septiembre fue nuestro “Independence Day in México”, dedicándonos ´Running Free´ .
Y para cerrar con broche de oro; la presentación de cada integrante de la banda con sombrero de charro y un ´Always Look On The Bright Side Of Life´, fue como los ingleses despidieron a nuestra locura musical, que nos llevó a vivir parte de la recreación de la gira “Made England Tour” en México.
¿De dónde sacamos fuerzas? No lo sé
Porque al final con lluvia, frío y neblina los más de “Fifty Thousand Motherfuckers” o quizá un poco más como dijo Bruce Dickinson, seguimos hasta el final y de pie ante Iron Maiden.
Up The Irons!
