Sin piedad y directo a la yugular, Andrés Calamaro abrió su presentación en el Auditorio Nacional; con el tema ´A Los Ojos´ , “y la gente me dice que deje de pensar en tí…” nos cantaba ligando así las remembranzas de los grandes Los Rodríguez: Germán Viella, Julián Infante y Ariel Rot.
Un inter con algunos sorbos de tequila y pipa, agradeciendo exquisitamente el excelente trato de la gente en Guadalajara, que llenó por completo el Teatro Diana las dos fechas previstas, además de presumir la camisa negra con vivos rojos y blancos, de la casa Madero, en Monterrey.
Caras tristes, abrazos efusivos y lágrimas de cocodrilo, se vieron al escuchar los acordes de los ´Crímenes Perfectos´ del argentino, que estuvieron dedicados al amor y al desamor; otro gran clásico coreado de principio a fin.
Una y tantas veces besó el escenario del Auditorio Nacional, con los guitarrazos de ´Por Siempre Tuyo´, que en conjunto con “prendido a tu botella vacía… dicen que hay un mundo de tentaciones” del ´Estadio Azteca´ y el breve homenaje al futbol argentino y la copa del Mundial de 1986 ´Maradona´, rompió el romanticismo de ´Algún Lugar´, ´Te Quiero Igual´ y ´Carnaval de Brasil´ ejemplificándonos así que las mujeres no son “un asunto pendiente…”
´Loco´ fue una de esas canciones con las que todos nos identificamos, pues quien no ha mirado “a las palomas comer, del pan que la gente les tira…” , caminando por la ciudad como un loco, y muy sabiamente decidió enseñarnos cómo dirigir el díficl camino que lleva ´El Salmón´ a través de un viaje por las nubes en ´Los Aviones´ blancos de la vieja Argentina, ´Sin documentos´.
Un regaño con golpes de seda y el sermón de que el ser humano dormía la tercera parte de su vida, porque si divides 24 en 8, es un tercio del día que pierdes soñando, con excepción de los bohemios, que no duermen y se amanecen cantando el “Tercio De Los Sueños”.
Una poética amenaza de muerte confesada por parte del “Salmón” causó el aplauso de muchos y el desagrado de otros, pues si quitan las corridas de toros en España, la sangre del cantante proveniente de sus venas; será utilizda para levantar a Picasso, en la Plaza de Toros española y rindiento honor a quien honor merece, ´Para Torero´ fue la demostración de que aparte de músico, es torero de corazón.
Por lo que calmó la euforia del comentario con ´Mi Enfermedad ´ y el pretexto de que ´el mundo me hizo así no puedo parar… soy el remedio sin receta y tu amor mi enfermedad´, continuando con ´Me Arde´ y la simplicidad de que solo “está disimulando, como el fuego sobre la superficie…”
Los temas en inglés no se hicieron esperar ´You Are So Beautiful ´ y los acordes de ´Stairway To Heaven´, que dedicó a las familias y los clubs de fans que lo siguen a todas partes, a las parejas de enamorados y los que están por enamorarse.
“No te preocupes Paloma; no hay pájaros en el nido” nos alegaba, parando de tajo el sentimiento tragado de miles de almas vulnerables al recuerdo de los puñales de la ´Flaca´ y “la estrella que sigue brillando…” de las ´Tres Marías´, que gritan a los cuatro vientos: ” si me vuelves a querer, las flores, volverán a florecer…”
´Alta Suciedad´ es el ejemplo de lo que siempre ha hecho en su carrera musical y lo que piensa de los demás, ´Los Chicos´ sencillamente fue el tema dirigido “a los amigos que se fueron primero” : Sandro, Pedro Infante, José Alfredo Jímenez, Tin Tan, Pancho Villa, Emiliano Zapata, El Che Guevara, entre otras tantos, “y hace mucho que los quiero ver…” finalizando así ese recuerdo mágico entre el quebranto de su voz, los aplausos y coros de ´Música Ligera´ del gran Gustavo Cerati; y con un último beso y un abrazo dirigido al público mexicano, cerró así su gira “Bohemio” en el coloso de Reforma de la Ciudad de México.