No hay plazo que no se cumpla. Así llegó uno de los fines de semana más esperado del año: el Corona Capital 2018.
El festival se ha consolidado como uno de los más importantes en México y cumplirá 10 años el próximo 2019. Es un evento que nos ha regalado una cantidad impresionante de momentos épicos, headliners que nos han volado la cabeza, que ha traído consigo a actos que jamás pensamos que podrían pisar tierras mexas, y aunque es criticado por muchos, es amado por otros tantos.
La edición previa al cumplimiento de esa década fue asombrosa. Alguna vez me dijeron que los mejores carteles del Capital eran en los años pares (2012, 2014, 2016…), y aunque creo que es subjetivo y de acuerdo al gusto de cada persona, con un lineup meticulosamente curado, el Corona Capital 2018 fue simplemente asombroso.
Día 1. Sábado 17 de noviembre
Las puertas se abrieron minutos después de las 2 de la tarde. Los asistentes comenzaron a darse cita en el escenario Corona para presenciar el show de Blank Range, otros tantos se congregaron en el Doritos para contemplar la magia de Gus Dapperton. Otros tantos acudían al Levi’s Tent por que deseaban ser hipnotizados por las notas lo-fi de Clairo y otros más se apoderaron del Corona Light para ver el show que Pale Waves tenían preparado.
La energía apenas comenzaba a hacer acto de presencia, y muchos aprovechaban para visitar las activaciones de marcas como Vans, Pepsi, Doritos, Uber, Spotify, cabe destacar que este año se contó con agua gratis y módulos solares para cargar celulares, lo que hizo más llevadera la jornada festivalera.
Alrededor de las 3:20, YUNGBLUD salió al escenario Corona, causando las ovaciones de un público joven que esperaba la actuación del joven rapero británico. Por otra parte, POND hacía lo propio en el Doritos, en el que la psicodelia de Nick Allbrook y compañía se encargaba de poner a cada asistente en un buen mood. Allbrook desbordaba magia e iridiscencia pura. Las personas gritaban y coreaban cada tema.
Hola, México. ¡Nos encanta estar con ustedes esta tarde!
La banda se encargó de las muestras de amor hacía sus fans, incluso el vocalista bajó del escenario por unos breves momentos.
En el escenario principal, Sparks nos maravillaba con su disco setentero. El público se fue congregando poco a poco, entre fieles seguidores y otros cuantos curiosos. Lo cierto es que la gente no dejaba de bailar, se dejaban llevar.
La emoción de Russel y Ron Mael era innegable, el primero habló:
“Está es la primera vez que viajamos a México, es increíble el recibimiento que nos están dando. Escuchamos cosas fabulosas de ustedes”.
Actos como los de Jenny Lewis, The Jesus & Mary Chain, Atlas Genius, Shannon And The Claims, Bastille y Panic! At The Disco eran algunos de los más ansiados por los asistentes, y en este último pudimos apreciar un cover impecable a Bohemian Rhapsody, mismo que no podía faltar pues ya lo habíamos visto a lo largo de su tour.
Dos shows pusieron a los fans en jaque, mientras The Kooks se presentaba en el escenario Corona, el imponente regreso de Friendly Fires tenía lugar en el Levi’s Tent.
Luke Pritchard y compañía le robaba el corazón a sus fans con temas de “Let’s Go Sunshine”, su más reciente entrega discográfica, seguidos por una selección de hits que los han consolidado dentro del gusto del público, como “Always Where I Need To Be”, “Junk Of The Heart” y la fabulosa “Naive”, coreada de principio a fin. Sin embargo, nos quedamos con una gran interrogante: ¿qué hay con Pete Denton?
Ed MacFarlane hacía lo propio, dejando sin aliento a un público eufórico con aquellos pasos de baile hipnotizantes. Cuando los primeros acordes de “Lovesick” sonaron, todo el mundo presente perdió la cabeza. El colorido confeti voló por toda la carpa Levi’s cuando “Jump In The Pool” se apoderó de los oídos, se escuchaban voces diciendo “güey, son los pinches Friendly Fires”, gritos de completa emoción. Y es que algo era claro, la banda era un must del festival. No había excusa para perdérselos.
Al mismo tiempo, también se presentaba Børns quien con su pop psicodélico y dreamy le puso magia al Corona Light.
Posteriormente, Lorde acaparó la atención en el escenario Doritos. Miles de fanáticos ya la esperaban desde el inicio de la jornada y no decepcionó a ninguno de ellos. Vestida de blanco, siendo una completa visión astral, la neozelandesa ofreció un perfecto show que duró aproximadamente 1 hora con 15 minutos.
Llegó uno de los momentos cruciales del primer día del festival, The Chemical Brothers comenzaba a tomar las riendas del Corona Light con un intro épico, para acto seguido, volarle la cabeza a cada uno de los asistentes con un show de techno oscuro y perfectamente ejecutado. Pudimos apreciar los nuevos visuales que formaban parte de su show, incluso un par de robots enormes.
Temas como “Free Yourself”, “Hey Boy Hey Girl”, y “Galvanize” erizaron la piel de cada una de las personas que contemplaban aquella presentación legendaria. Puede que el escenario les quedara chico, pero el dueto ofreció una calidad excepcional. Eran otros imperdibles.
Robbie Williams fue el encargado de cerrar el primer día del Corona Capital y lo hizo como el grande que es. Verdaderos hits como “Tripping”, “Rock DJ”, “Feel” y otros más, desfilaron por el set que el británico tenía preparado para la noche. Era uno de los interpretes más esperados por los fans mexicanos, y como es su costumbre, subió a una fan al escenario, le canto y hasta la besó.
El cantante invitó a su padre y le rindió un tributo con el tema “Better Man”, llenándolo de muestras de amor:
“México, quiero presentarles a mi padre, es el mejor hombre del mundo”.
Previo al final de su actuación, “Angel” comenzó a sonar, haciendo un nudo en la garganta de muchos espectadores, llevando a algunos incluso a las lagrimas. Todo culminó con un cover del tema “My Way” de Frank Sinatra, un Robbie Williams con una camiseta de la selección mexicana y miles de voces uniéndose en una sola.
Día 2. Domingo 18 de noviembre
Parte 2 de la edición. Algunos asistentes estaban cansados por la fiesta del día anterior, sin embargo nada podía detenerlos. Otros tantos visitaban el Autódromo por ese único día.
King Henry y Sasha Sloan pisaron el escenario Corona y el Levi’s Tent simultáneamente, por lo que cualquier esperanza de verlos juntos con la colaboración que tienen juntos, quedó descartada. Ambos shows fueron perfectos para inaugurar aquella tarde con un poco de nubes.
En el escenario principal actuaba Nathaniel Rateliff & The Night Sweats y con un folk limpio con tintes soul le dio el toque perfecto a la tarde de domingo.
The Lemon Twigs pisaron el Doritos alrededor de las 5 de la tarde y al mismo tiempo, Superorganism deleitaba a un gran número de personas en el Levi’s Tent. Eran altas las expectativas hacia ambos grupos y ninguno decepcionó a los asistentes.
Los hermanos D’Addario no estaban acompañados por sus grandes amigos Danny Ayala y Megan Zeankowski, y pudimos ver a Brian bailando en lugar de encargarse de la batería, su show fue exuberante.
Superorganism contaba con visuales psicodélicos y globos en forma de ballena. La diversión no faltó.
The Neighbourhood fue una de las bandas más esperadas de este día. Su actuación fue relajada y un poco plana, pero los fans lo disfrutaron como nunca, temas como “Sweater Weather” y “Stuck With You” fueron los más coreados de su set.
Una de las sorpresas más gratas de la noche nos la dio Digitalism, el dúo alemán se presentó en el Corona Light y puso a bailar a los asistentes. Para ese momento, la energía estaba en su máximo esplendor.
En el escenario principal, MGMT hipnotizó a todos, después de haber ofrecido un show un poco flojo en Pulso GNP, Andrew VanWyngarden y compañía redimieron aquella actuación de una manera épica.
“Time To Pretend”, “Little Dark Age”, “Kids”, “Electric Feel”, entre otros, fueron los temas con los que los asistentes brincaban y gritaban. La euforia hacía de lo suyo.
“Ciudad de Mexico, nos encanta visitarlos”.
En el Doritos, Nine Inch Nails enloqueció a grandes y chicos, con un show de luces y su música experimental fueron una de las mejores presentaciones de la noche.
La última presentación que vimos fue la de New Order y todo se descontroló. Tocaron joyas como “Disorder”, “Bizarre Love Triangle”, la aclamada “Blue Monday” y sorprendieron a todos con el emblemático “Love Will Tear Us Apart” de Joy Division, banda que solían formar a lado de Peter Hook y el fallecido Ian Curtis, de aquel pudimos ver su rostro en los visuales que acompañaban esta interpretación.
El excelente cierre fue algo que esperábamos, pues cada integrante del lineup lo dejó en el escenario. El próximo año se celebrará la décima edición del Corona Capital y por si esto pareciera poco, también han anunciado la fecha de la segunda realización del Corona Capital Guadalajara 2019, y estamos seguros de que ambas serán unas fiestotas épicas.
¿Ya superaron el Corona Capital 2018? Nosotros seguimos en shock.