Texto y fotos por: Daniel Martínez
El Festival Amigo en esta tercera edición nos permitió ver un despliegue de artistas que poseen desde un alcance menor, hasta uno ya consolidado y popular, sin embargo, las nuevas voces sonorizaron una lírica más actual y melosa, terminando por ser acompañada de las propuestas musicales más reconocidas en esta época. Sin duda una presentación al alcance de las anteriores ediciones pero que trajo consigo una evolución más al Festival; esperamos que año con año se sigan superando.
Recuento del Festival Amigo
Coolest Andie, el talento emergente que dio el banderazo de salida
La destinada para abrir el Festival fue la tierna Coolest Andie que a través de su voz y su acústica logró crear una carta de amor muy dulce para dedicar a alguien, su música pop para chavas tristes llegó al corazón de las asistentes.
El siguiente en saltar al escenario fue el dúo Dawn Avenue, desde el estado de Cuernavaca Morelos quienes con sus canciones iniciaron el Festival de una manera ligera, para tener un final más caótico y así prender motores para lo que se venía.
La tercera agrupación en tocar fue Astronomía Interior, estos músicos ya experimentados atrajeron al público con sintetizadores a tope y la batería eléctrica sonando, se nota en sus canciones una leve influencia de sus trabajos ya anteriores; con este nuevo proyecto se siente definitivamente una esencia distinta.
Tocaba el turno de Bandalos Chinos, esta agrupación Argentina encantó a todos con sus letras pop, sus guitarras funk y un sin cesar de movimiento en el escenario, se siente la conexión de la banda al momento de verlos en vivo, sin duda una de las propuestas fuertes del festival.
¿Qué se puede decir de Austin TV?, ¡No lo sabía!, el regreso de esta banda a los escenarios fue uno de los más esperados, terminó siendo una potencia al momento de tocar en vivo y un gran espectáculo de luces y visuales que se acomodan con cada canción que tocan y que generó una sinergía en el público.
¡Ah, cómo te quiero Little Jesus!, todos los asistentes estábamos expectantes de ver tocar esta banda ya establecida en el medio musical, un sin fin de emociones que te hacen sentir a través de cada una de sus canciones.
Uno de los favoritos del público, León Larregui, se hizo presente en el escenario en punto de las 10 de la noche, sinceramente no podía faltar su sofisticación en el escenario, acompañado de sus músicos de confianza presentaba unos visuales bastante psicodélicos que van acorde a su esencia.
Plastilina Mosh terminó teletransportándonos a los años 2000s con sus más grandes éxitos. Este dúo embriagó a los asistentes siendo su presentación una experiencia que nos remonta a sus clásicas de antaño que rememoran y generan nostalgia en quien los escuchó.
Los Bunkers llegan a cerrar el festival con broche de oro, la agrupación chilena fue una de las más esperadas, a pesar de su pequeño atraso puso a cantar y a saltar a todo el público con un cierre increíble digno de la espera que se tuvo que hacer.
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