Con “Ira, ira, ira (Cap. 5: Ira)”, el artista suizo-mexicano nos sumerge en el quinto capítulo de su álbum conceptual VII, una travesía musical y visual que explora los siete pecados capitales desde el sonido, la emoción y la estética más visceral.
Este nuevo lanzamiento es pura combustión. La canción nace de la mezcla explosiva entre el rock y el reggaetón, atravesada por las influencias asiáticas que se han vuelto marca registrada de Frog Shaman. Es una pieza que late con el pulso del enojo contemporáneo: esa furia contenida que todos llevamos dentro y que, a veces, simplemente necesita gritar.
El videoclip, inspirado en Falling Down (Un día de furia, 1993), retrata el momento exacto en que un ciudadano común se quiebra ante la presión del día a día. Atrapado en el tráfico y en su propia cabeza, el protagonista encarna la delgada línea entre la calma y el estallido. Con una estética cinematográfica impecable y una narrativa cargada de simbolismo, el video es tanto una crítica al desgaste emocional moderno como un espejo de nuestra propia ira reprimida.
Musicalmente, “Ira, ira, ira” es una experiencia de catarsis: guitarras que muerden, percusiones que golpean y una base rítmica que te lleva directo al borde. Es el sonido del caos transformado en arte.
Frog Shaman continúa demostrando que su proyecto VII no es solo un álbum, sino un universo narrativo donde cada pecado revela una emoción humana en su forma más pura. Este capítulo, el de la ira, no busca justificarla, sino entenderla: abrazar el fuego sin dejarse consumir.
Te dejamos aquí el video para que lo disfrutes.
