Fotos cortesía: César Vicuña /OCESA
Tras 4 años de su última visita a la Ciudad de México y cambios en su alineación, Paramore regresó al Palacio de los Deportes para brindar una noche inolvidable con su After Laughter Tour. Contó con PVRIS como acto previo, y como era de esperarse, dejaron a los asistentes con ganas de disfrutar un show a solas con esta banda. Esta no es la primera vez que Paramore brinda este espacio a grandes talentos; en 2013 fue Twenty One Pilots los encargados de abrir la noche, dejando un buen sabor de boca previo al show principal.
Hayley Williams, Taylor York, Zac Farro y sus demás elementos salieron a las 9:15 en punto a un escenario con tres círculos compuestos de focos como fondo. Para muchos podría parecer una producción bastante “sencilla” pero esta agrupación en acción lo vale todo. La primer canción que sonó en este recinto fue “Hard Times” acompañada del baile singular de la líder de la banda, seguida de “Ignorance”, “Still Into You”, “Day Dreaming” y “Forgiveness”.
Este concierto se caracterizó por estar lleno de momentos cumbre, uno de ellos fue durante la interpretación de “Brick by Boring Brick” en el que sin duda los aplausos y gritos sonaron más fuertes; para no terminar con la euforia de golpe continuaron con “Playing God”.
Después de interpretar este bloque, Hayley saludó con su perfecto español con un “¡Buenas noches!” para agregar: “We are Paramore… It’s been a long time and we miss you a lot… Do you Bring your shows to dance?”. Terminado el discurso los temas “That’s What You Get” y “I Caught Myself” sonaron.
Tras el performance de estos temas, Paramore interpretó temas más tranquilos a los que Hayley denominó como “tristes”, después de cantar “Hate to See Your Heart Break” las palabras de Williams volvieron a llenar el recinto:
“Esta es la primera vez que venimos a México en años, no sabíamos qué esperaban de nuestra presentación… Que hermoso es estar aquí y celebrar la vida, la música y estar vivos con ustedes.”
Y entonces otro de los momentos más esperados comenzó con el tema “26”, que además de ser la interpretación más íntima de entre Hayley y Taylor York durante el tour, estuvo acompañada de la dinámica planeada por la fanpage de México. En días anteriores se había propuesto iluminar el Palacio de los Deportes con Luces verdes para los asistentes de General A; luces blancas para los asistentes de General B; y luces rojas para los asistentes en Sección D y E. Todo esto como símbolo de apoyo a nuestro país tras los sucesos del 19 de Septiembre.
La interpretación de “Told You So”, el Cover “Everywhere” a Fleetwood Mac y “Fake Happy” dejarían atrás el bloque melancólico para dar paso a otro momento cumbre. Paramore se encuentra celebrando la primera década del álbum “RIOT!”:
“¿Dónde estaban hace 10 años?… Hace diez años tuvimos un disco, RIOT! en 2007, que cambió nuestras vidas, y en el tour vinimos por primera vez a México, así que si no les importa festejar… ”
Seguido de este discurso la entrada, ya conocida, con mariachis del tema “Misery Business” comenzó y a mitad del tema escogió a una persona del público para que se le uniera en el escenario. Esta no es la primera vez que Hayley realiza esta dinámica; el afortunado fue “Jorge”, quien terminó de interpretar el tema a duo y cerrar uno de los momentos más eufóricos de la noche.
Tras este tema, los asistentes sabían que el final estaba cerca, luego de “Ain’t Fun” y “Caught in the Middle”, sucedió otra sorpresa cuando Zac Farro intercambió la batería por el micrófono para interpretar “Scooby’s in the Back”, un Cover de HalfNoise.
Por último, la presentación de la banda no podía faltar, entre gritos y aplausos Hayley presentó a cada uno aunque los aplausos para Zac –quien recién regresó a la banda–, Taylor y la propia Williams, fueron mayores. Después de los agradecimientos y el intento de Hayley por recordar la frase “mi corazón está contigo” en español, alzaron la bandera mexicana y se despidieron con “Rose-Colored Boy”.
Un show lleno de baile, luces y rock, un paso por los cambios que Paramore ha tenido en su música a lo largo de los años desde ‘All We Know is Falling’ hasta ‘Afeter Laughter’, pero siempre manteniendo su esencia.