Hace ya bastantes ayeres que las películas de animación tienen una butaca bien al frente dentro de la aceptación global; desde que los europeos comenzaron a darle vida a sus experimentos con secuencias gráficas en donde no existe un tiempo real, sino plano sobre plano, hasta la consolidación de portentosas compañías dedicadas al negocio. Japón ha sido uno de los países más prolíficos y de mayor impacto en cuanto a animaciones por papel y lápiz, si bien se sabe que este principio es parte obvia del éxito del género, esta idea ha ido cambiando radicalmente al menos en las últimas dos décadas gracias a las nuevas tecnologías que permiten la animación de gráficos completamente por ordenador, Toy Story (1995), la primer película de Pixar es el parteaguas de toda una generación y la entrada por la puerta grande de este tipo de películas.
El panorama, al menos en occidente, sobre este género ha estado concentrado en gran medida por las industrias Disney Pictures, y la flamante Pixar, ambas con un poder adquisitivo tan enorme que prácticamente han venido monopolizando el mercado, en mayor parte gracias a la publicidad, pero existen actualmente incontables estilos dentro de la animación que sería imprudente no dar crédito o siquiera voltear a echar un vistazo a las magníficas producciones que se realizan en todo el globo.
El espectro infantil es un recurso muy utilizado, ya que es el público en donde mayor demanda existe, en México se ha venido desarrollando con más fuerza esta industria, lamentablemente encontramos trabajos que apelan totalmente al cliché de la cultura resultando en un chiste bastante gastado pero que con sorpresa se ha colocado con una acogida muy favorable dentro de lo posible. Sin en cambio es el público más experimentado el que se arriesga y busca un contexto distinto a las megaproducciones que acaparan por mucho las preferencias de la gente con un premisa simple y efectiva: entretenimiento básico nada complejo, sin embargo como consumidores tendríamos que poner mayor atención en la calidad de el mensaje. Es en este tono en el que me permito citar 5 películas que, en lo personal, destacan por mucho en creatividad y originalidad, o simplemente por estar tan bien hechas.
1.- Ralph el Demoledor (“Wreck-it Ralph”, 2012)
Con la llegada del 3D, hubo una euforia por parte de los productores a convertir sus rodajes dejando mucho que desear dentro de su calidad. Varios titulos pasaron con más pena que gloria, no así Ralph el Demoledor que desde sus primeros avances lograba la empatía de varios impetuosos del mundo de los videojuegos. Siendo una historia pensada originalmente para niños, esta cinta dirigida por Rich Moore explora el mundo detras de las pantallas de emuladores, nos ofrece un imaginario sobre la vida que lleva un personaje de arcade como lo es Ralph y su incipiente necesidad de aceptación. La película es por demás entretenida por varios factores, además regala cameos de personajes bien identificados por los gamers.
2.- El fantástico Sr. Zorro (“Fantastic Mr. Fox”, 2009)
Bajo la dirección de Wes Anderson, esta cinta es una adaptación del libro de Roald Dahl de 1970, “El Superzorro”. Con efectos de Stop-motion dentro de su narrativa visual, esta animación cuenta las hazañas de un astuto Zorro de campo que tiene que arreglarse la vida bajo la amenaza de la industrialización poniendo en grave riesgo a su familia y su comunidad al retomar sus viejos hábitos de ladronzuelo. Un titulo imprescindible dentro de la amplia gama que por su naturaleza de fábula entrega un entretenimiento bien dotado y universal.
3.- Despertando a la Vida (“Waking Life”, 2001)
Del estadounidense Richard Linklater, es la primera película que vi en donde aparece la técnica del rotoscopio, es decir, se calcaron en dibujo las secuencias de una filmación real para capturar el realismo de los movimientos propios de los actores, para después animarlo todo con ayuda del ordenador logrando una de las obras más importantes de Linklater y de la animación en general. La premisa de la cinta es puramente existencialista, aproximadamente dos horas de diálogos y monólogos que supuran una realidad compleja dentro de la misma.
4.- Los Amos del Tiempo (“Maitres du Temps”, 1982)
Es un filme de el francés René Laloux basado en un libro de Stefan Wul (“El huerfano de Perdide” de 1958), y que tuve la suerte de ver hace ya bastante tiempo en un canal público, desde entonces no me la he podido borrar de la memoria dada su originalidad y temática de ficción total. La historia se centra en el pequeño Piel, quién queda a su suerte en un planeta extraño, después de perder a sus padres y que cuenta tan solo con una suerte de intercomunicador galáctico que decodifica la señal de un viejo amigo de su padre, el cual se da a la tarea de rescatarlo. La película cuenta con los fantásticos diseños de personajes y ambientación del reconocido ilustrador francés Moebius.
5.- Peur(s) du Noir
Es una película también francesa de 2007 dirigida por Blutch y Charles Burns de la cual no tengo referencias en español, pero me decido a incluirla en este listado por su peculiaridad de abordar el género de terror y sus animaciones monocromáticas que logran ese ambiente tétrico y de suspenso. Se conforma de seis historias que se ven entrelazadas por un tipo que vaga con unos maliciosos perros y que en general está cargada de simbolismos, los cuales hacen de los planos bien cuidados por parte de sus ilustradores un deleite visual y narrativo que pocas veces se conjuga dentro de la animación. Es una cinta que bien vale la pena para reconocer el enorme esfuerzo de entregar un paisaje distinto dentro de la monotonía que nos avasalla.
https://www.youtube.com/watch?v=buoG3gLa6Ik
