Con mucha tensión y una atmósfera lúgubre, Terror en Shelby Oaks es una experiencia terrorífica que te mantendrá al borde del asiento.
Terror en Shelby Oaks es el primer largometraje dirigido por Chris Stuckmann y se nota mucho el cariño que le tiene al género del terror. Es una historia que mezcla un tipo de falso documental con found footage de una forma que se siente muy natural y, sobre todo, muy tensa. No es de esas cintas que solo buscan el susto fácil, más bien quiere que estés incómodo todo el tiempo, mirando a las sombras y preguntándote qué es lo que se esconde ahí.
Algo que Terror en Shelby Oaks hace muy bien es construir una atmósfera lúgubre que casi no te deja respirar, algo que cualquier película de terror desearía tener. Muchos momentos son solo personajes en espacios oscuros, con silencio, con ruidos lejanos, con esa sensación de que algo está por pasar, pero no sabes exactamente cuándo. Y eso, más que un montón de jumpscares, es lo que de verdad te mantiene al borde del asiento, lo que realmente da miedo, es la audiencia en contra de sus pensamientos. La tensión se va acumulando poco a poco, plano tras plano, hasta que ya traes los nervios de punta.
La parte de found footage se siente como el corazón de la película. Esas grabaciones, esos videos viejos y las imágenes “caseras” le dan un toque muy inquietante a todo. No parece algo pulido y bonito, sino algo que podrías encontrar en un archivo perdido o en una carpeta olvidada en tu computadora. Justo por eso funciona: se ve y se siente más real.

También es interesante que Terror en Shelby Oaks no solo quiere asustar, sino que trae encima una carga emocional. Hay temas de culpa, miedo, trauma y relaciones rotas que hacen que los personajes no sean simples víctimas de “un fantasma más”. Eso hace que la historia se sienta un poco más pesada, en el buen sentido, porque no nada más estás preocupado por el siguiente susto, sino por lo que estas personas están viviendo por dentro. Incluso en escenas de día, la película conserva una sensación rara, como si algo estuviera fuera de lugar todo el tiempo.
Claro, como con cualquier ópera prima, Algunas partes pueden sentirse un poco largas, y se nota que Stuckmann todavía está encontrando su estilo como director. Pero, aun con esos detalles, el resultado es una experiencia terrorífica, con mucha tensión y una atmósfera muy oscura que te mantiene pegado a la pantalla. Si te gusta el terror que apuesta más por el ambiente y la incomodidad que por los sustos baratos, Terror en Shelby Oaks es una muy buena opción para que la veas en cines esta semana.

La nueva película de Diamond Films México, Terror en Shelby Oaks llega a cines este 20 de noviembre y no se la pueden perder.








