Actualmente The War On Drugs ha conseguido algo extraordinario: convertirse en una de las bandas más importantes del indie rock sin ajustarse a los parámetros comerciales convencionales. En lugar de seguir las fórmulas de éxito que dictan los hits efímeros y los sencillos de radio, la banda liderada por Adam Granduciel ha construido su legado a partir de la autenticidad, la introspección y una dedicación inquebrantable a su visión musical.
Así fue cómo The War On Drugs se convirtieron en una banda única
Desde su debut en 2008 con Wagonwheel Blues, la propuesta de The War On Drugs siempre se ha sentido distinta, casi contracultural. Granduciel y su banda no se preocupan por crear música que se adapte a lo que se espera de ellos; sus canciones son largas, hipnóticas, y llenas de capas de sonido que remiten tanto a la tradición del rock clásico como a la experimentación moderna. Esta mezcla entre el rock psicodélico, el folk y la música de carretera ha sido su distintivo, posicionándolos en un terreno propio, donde no necesitan encajar en los moldes que predominan en la industria.
Fue con Lost in the Dream (2014) cuando realmente captaron la atención de un público más amplio. El álbum, cargado de una atmósfera melancólica, refleja el estado emocional de Granduciel mientras luchaba con la ansiedad y la soledad. Sin embargo, en lugar de simplificar estas emociones para atraer a un público masivo, The War On Drugs las canalizó en paisajes sonoros expansivos, con canciones que alcanzaban hasta los 10 minutos. Este enfoque no era el típico camino hacia el éxito en la industria musical, pero funcionó. Lost in the Dream se convirtió en un fenómeno en el circuito del indie, aclamado tanto por críticos como por fanáticos.
La consagración definitiva llegó en 2017 con A Deeper Understanding, el disco que les valió el Grammy al Mejor Álbum de Rock. Lo notable de este logro no fue solo la victoria en una categoría históricamente reservada para bandas más convencionales, sino el hecho de que The War On Drugs había llegado ahí sin hacer concesiones. A Deeper Understanding no sacrificó el sonido característico de la banda; más bien, lo profundizó. La producción fue más pulida, pero las emociones seguían siendo crudas, las guitarras seguían siendo envolventes, y el viaje introspectivo de Granduciel seguía siendo el motor creativo.
La victoria en los Grammy no significó que la banda se desvió hacia un sonido más accesible o pop. Al contrario, The War On Drugs continuó explorando su estilo con el mismo compromiso que los había llevado hasta ese punto. Su siguiente álbum, I Don’t Live Here Anymore (2021), mantuvo esa esencia expansiva, mientras Granduciel se sumergía aún más en sus influencias del rock de los 80, sin perder la profundidad lírica ni el cuidado por los detalles en la producción.
Lo que hace especial a The War On Drugs es que nunca han perseguido la fama ni los éxitos comerciales, sino que han creado su propio espacio en la música. Han demostrado que es posible alcanzar el éxito manteniendo la integridad artística y cultivando una relación genuina con sus fanáticos.
The War On Drugs y The National en México
Esta semana, The War On Drugs estará compartiendo escenario en un concierto irrepetible junto a The National en el Palacio de los Deportes. Para los fanáticos de ambas bandas, será una oportunidad única de disfrutar de dos de las propuestas más importantes del indie rock en un solo evento.
Aún quedan algunos boletos disponibles, y es una ocasión que promete ser muy especial, donde las atmósferas sonoras de The War On Drugs y la emotividad de The National se fusionarán para una noche inolvidable.
