A finales de la década de los ochenta comenzaron a incubarse un montón de bandas que pasarían a la historia e incluso fueron pieza clave del rock, parecía que se vivía una explosión de creatividad juvenil. Uno de estos ejemplos son este combo americano surgido en 1986 surgido gracias la alianza entre Joey Santigo y Black Francis.
Este par de chicos compartían un interés por el rock, surf y el punk, gracias a este género pudieron encontrar a la bajista Kim Deal, por último se unió el batería David Lovering. A pesar de que en esas épocas se las vieron duras por no contar con nada de dinero, el destino al poco tiempo les sonrió porque tuvieron la suerte de ser descubiertos y así tener la oportunidad de grabar un disco.
Explorando la discografía de los Pixies
A pesar de ser estadounidenses, quien se fijó en ellos y los editó fue el famosísimo sello independiente británico 4AD, ese que era la casa de grandes joyas musicales ochenteras como los Cocteau Twins o Dead Can Dance. Fue así como los Pixies debutaron en 1987 con el EP Come On Pilgrim, en el que se nota mucho la explosiva fusión que la agrupación lograba crear gracias a las influencias tan variadas de sus componentes.
Aquí viene quizás la mejor parte, pues al año siguiente publicaron su trabajo más aclamado que es nada más y nada menos que Surfer Rosa, un excelente álbum que curiosamente tuvo únicamente el single Gigantic y tampoco destacó por haber llegado a lo más alto de las listas de popularidad. Pero no es grave, pues con el paso del tiempo acabó posicionándose como un trabajo de culto e incluso se valoró correctamente gracias a temas como la mega popular Where Is My Mind?. Por cierto, también fue víctima de la censura gracias a la portada en la que se mostraba la foto de una chica en topless.
Para 1989 sacan su segundo LP que lleva por nombre Doolittle, otro gran lanzamiento al que aún se le dedican reseñas y que influenció a futuros rockstars noventeros como Kurt Cobain. Probablemente aquí se encontraban en su punto más alto, ya que la prensa especializada elogió el disco, el cual se vendió muy bien en Estados Unidos, el ecologista tema Monkey Gone to Heaven y la vieja composición Here Comes Your Man son los tracks que se desprendieron como sencillos.
La banda nuevamente se metió al estudio para realizar Bossanova, que apareció en 1990 y que tuvo algunas dificultades en los momentos de su grabación que fue algo atropellada por distintas circunstancias. De aquí se destaca Velouria, pieza de aires grunge que ha sido muy covereada. Bien dicen que la felicidad no es eterna y entrando en la década de los noventa sale a la luz el que sería el entonces último disco de los intérpretes de Dig for Fire. Pues en 1991 apareció Trompe le Monde, en el que su sonido ya no era igual a lo que venían haciendo pero no hubo problema porque obtuvo las mejores críticas de la prensa especializada y Planet of Sound o Alec Eiffel, son de las canciones más recordadas que forman parte del tracklist.
A pesar de que se encontraban en un gran momento, en 1993 por decisión de Joey Santiago, quien como dicen por ahí ”por sus pistolas” dio fin a los Pixies sin haber platicado esta fuerte elección. No fue hasta 2004 cuando se reunieron y hasta dieron a conocer una rola nueva titulada Bam Thwok, realizaron tours mundiales y en los años posteriores se presentaron en Lollapalooza. Hasta 2013 volvieron a impactar, sólo que esta vez fue para dar a conocer la salida del proyecto por parte de la bajista Kim, que fue reemplazada por la argentina Paz Lenchantin.
No sé si ya habían perdido la magia, pero se aventaron a lanzar Indie Cindy en 2014 y el cual tuvo posiblemente las reseñas más bajas de toda su discografía. Luego en 2016 Head Carrier, otro que no estuvo espectacular pero era pasable y en 2019 Beneath The Eyrie, que es el menos peor desde su reencuentro para los expertos, aunque tampoco está a la altura de sus mejores álbumes ni mucho menos será reseñado como Surfer Rosa en el libro 1001 discos que hay que escuchar antes de morir.
Fue en 2022 que la banda lanzó Doggerel, su más reciente placa, aquí, en doce canciones, oscilan entre el rock y el folk de forma bastante drástica, y la nítida y se desenvuelve en una dinámica de producción que sin duda funciona y este material, lo estaremos escuchando próximamente totalmente en vivo.
Los Pixies regresan a México
Con todo esto, les recordamos que la legendaria banda, ya muy querida por el público mexicano estará de visita en única fecha este 18 de mayo en el Teatro Metropólitan, no puedes faltar. Consigue tus boletos en Ticketmaster.